Hermosa tu luz

Mil veces he creido estar cerca de mi mujer perfecta, y una vez más creo estarlo o creí estarlo.
La luz se esconde tras la montaña y se aleja de la celeste y diáfana pupila, el firmamento. Poco a poco las nubes son reemplazadas por estrellas y el viento juega con los árboles saludando a los que están y a los que vendrán. En mi lugar favorito de los últimos días con el sonido del agua, los verdes pastos y el olor a tierra mojada, te he bautizado atardecer.
El atardecer es más bello junto a ti, pues tu luz es tan hermosa como la del sol. Tengo el extraño sentimiento de extrañarla, y solo fueron tres días de estar a tu lado, por inercia miraba la puerta por si la cruzabas, sueño con los ojos abiertos queriendo que aparezacas a mi espalda, me tapes los ojos y me des un beso con sabor a hierbas. Tu pelo, recuerdo, jugaba con el viento y baila un vals con tu voz, tus manos que no logré conoces han de ser suaves como el terciopelo y tu risa grabada en mis oidos me hace volar.
Creo haber conocido a la mujer perfecta, pero como es costumbre, una vez más llegué demasiado tarde. No cabe duda que me costará mucho sacarte de mi cabeza
No imaginas como deseo amarrarte con un abrazo sentirte cerca y decir con propiedad "Te quiero". No tengo dudas, eras tú la mujer de mis sueños.

Despacio te quitaba la ropa,
sin prisas, sin risas,
ante el silencio de una copa,
de un ojo observador
que contempla
esas dos rosas,
que nacieron del fuego
de la cordura más loca.
*
Diciendo adiós a los botones
a la blusa que se desvanecía
al sujetador que no volvía,
a tu mirada ingenua
de niña que aún vive en la luna.
*
El tiempo se paró,
se paró a observarnos,
para ver a dos enamorados
que durante un rato se amaban,
como Romeo y Julieta
como la Bestia y la Bella.
*
Hasta ver tu cuerpo desnudo
y tocarlo como el regalo más preciado,
vislumbrar la belleza
desde la primera butaca,
como actor, espectador,
guionista y director.
*
Tocando tus labios
con la yema de mis dedos,
mientras yo besaba
tu piel aterciopelada.
*
Era una noche oscura
como otra cualquiera,
yo entre tus brazos
y tú en mi regazo.
*
El juego de cada día
de cada vida
de cada letra
palabra o acento,
de cada mujer
que pasó por mis versos.
*
Y los besos nunca se acaban
y las caricias
y las delicias de tu mirada,
y las ráfagas que llegan y van
y el placer del principio y el fin,
¿qué sería yo sin ti?
*
Pero sólo era el sueño de todas las noches,
soñando que soñaba
a hacerlo realidad,
mientras lejos tú te hallabas
en alguna lugar
de mi enorme fantasía,
con tu mirada, tus ojos
tu cuerpo y tus labios,
soñado que la vida
es la imaginación
del pobre poeta
sin luz ni amor.

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NOTA AL MARGEN